Capitulo 25

*Mi padre estaba tomando la situación muy bien, bueno más bien de lo que yo me imaginaba tomamos asiento mientras el terminaba de hacer lo suyo de vez en cuando hacía comentarios de lo bien que nos veíamos juntos lo cual fue incomodo para mí. Me pare en un momento que tuve y Salí para tomar aire, me recargue en la pared y empecé a ver la calle vacía

-¿Por qué tan sola?- pregunto una voz detrás de mí, gire para ver su cara y me arrepentí de haberlo hecho, gire para ver de quien era la voz por pura curiosidad

-¿Qué quieres Patricio?- pregunte asiendo cierto gesto de desagrado en mi rostro

-nada, pasaba por aquí y casualmente me tope contigo- dijo recargándose en la pared, arquee la cerca dudando de lo que decía; tratando de Patricio nada se daba por “casualidad”- pensé que tu novio estaría conmigo

-pensé que pasabas por casualidad… ¿Cómo sabes que Alex está conmigo?

-bueno últimamente están siempre juntos lo cual si me preguntas me molesta- dijo

-no tiene porque, tu y yo ya no somos nada y para serte sincera eso de que pasabas por aquí no me la creo- dije hablando cada vez más rápido

-bueno tienes razón, no pasaba casualmente, los vi a los dos en un restaurante-dijo como si eso no importara, puse los ojos en blanco y lo rodee para entrar este me tomo del brazo y me detuvo, a pesar de lo obscuro que estaba pude notar una sonrisa en su rostro- ¿tienes prisa dulzura?

-sí, adiós- dije intentando zafarme- si no me sueltas juro que grito

-no hay que llegar a esos extremos nena- dijo apegándome a él, por más que me apartaba este me sostenía con más fuerza. Las voces de mi padre y mi novio aproximase hizo que me soltara

-Audrey ¿Qué haces que Patricio aquí afuera?- pregunto mi padre al ver que no había nadie más en la calle. Alex salió detrás de él y le lanzo miradas de fuego a mi ex novio, la verdad era una escena algo incomoda, Alex se coloco a un lado mío y me tomo de la mano sin decir nada

-saludando papa- respondí tarde

-Señor Thompson- dijo Pato saludando a mi padre- tenía mucho sin verlo

-concuerdo con eso Patricio pero es un poco tarde ¿quieres que te lleve a tu casa? –pregunto amablemente mi padre aunque pude ver que en su cara había algo que no comprendía como una indiferencia entre ellos dos

“di que no, di que no” me decía por mis adentros

-claro- acepto Patricio quien subió al carro mucho antes que mi novio, yo me fui adelante con mi padre y Alex atrás con mi ex. Me sentía algo incomoda por llevar a mi ex novio y a mi actual novio en la parte trasera del auto de mi padre; por lo menos no estábamos los tres solos y no podían golpearse o algo parecido. Mi padre lanzaba miradas por el retrovisor y a mí me daba miedo girar la cabeza para ver qué pasaba atrás, tuve que luchar con la tentación un par de veces. Dejamos a ambos en sus respectivas casas pero no pude despedirme de Alex como hubiera querido. Después de llegar a casa mi padre me dio el beso de las buenas noches y me fui a mi cuarto a darme un buen baño, cuando Salí me recosté en la cama a leer una de las revistas de moda de mi amiga a quien no había visto en todo el día cuando el tono de “Windows Down” de Big Time Rush sonó en mi celular, conteste sin ponerle atención a quien era ya que estaba concentrada en una sección de la dichosa revista

-¿bueno?- dije aun sin saber quién era

-Hola nena- dijo Alex al otro lado del teléfono

-¡Alex!- casi grite-hola

-jajá que gusto que te pongas contenta porque te llamo

-¿Cómo no hacerlo? Oye, disculpa por lo de Patricio de verdad no tenía idea de…

-tranquila amor- dijo interrumpiéndome yo cerré la revista para ponerle toda mi atención- no te preocupes sin sangre no hay culpa

-que bien que lo entiendas, ¿necesitabas algo amor?

-no, bueno la verdad es que con todo el rollo de que me mandaron a la parte trasera del carro….-dijo casi bromeando- bueno…no tuve tiempo de despedirme y desearte feliz noche

-créeme ahora tengo una feliz noche- dije, sentí como en mi rostro se dibujaba una sonrisa

-jajá que bien- dijo entre risas- te amo- dijo más serio

-también te amo Alex- dije con una sonrisa

-¿recuerdas  el pastel que te debo?- pregunto, yo hice memoria hablaba de la noche del accidente la tonta apuesta

-si ¿Por qué?

-bueno, mañana te lo daré

-no tienes que hacerlo, fue una apuesta tonta sin importancia

-¡hey! En lo que tú tengas que ver es importante ¿de acuerdo? Además, es un buen pretexto para pasar tiempo juntos…lo hornearemos

-vaya, además de cocinar también horneas pasteles ¿acaso eres chef en cubierta?

-jajá es otra forma de llamar al arte culinario si así lo deseas- dijo

-bien, entonces te esperare en casa- dije mientras acariciaba el oso que él me había dado

-bien, llegare temprano- prometió

-despertare temprano- dije- buenas noches amor

-buenas noches nena- dijo para después hacer el sonido de un beso por el teléfono, me reí para después imitarlo. Colgué el teléfono y me quede dormida con la esperanza de poderme despertar temprano a la mañana siguiente.

#. Después de una noche cansada desperté de un humor que hace mucho no tenia, Alex había llegado temprano tal y como lo prometió de hecho mucho más temprano de que me levantara cuando desperté ya tenía todos los ingredientes en la barrita de la cocina ni siquiera me dio oportunidad de quitarme la pijama

-vaya, te lo tomaste en serio- dije mientras me acercaba a él y le daba un beso de buenos días, el lo acepto regresándomelo y abrazándome

-te dije que era importante y serio

-ya lo creo…- dije mientras metía mi dedo en el betún

-umm venilla, atinaste- comente

-jajá que bueno que te guste ¿quieres empezar ya? –pregunto mientras terminaba de acomodar unas cosas

-estoy más que lista para aprender tus artes culinarias –dije apretando mis manos

-de acuerdo- dijo con una sonrisa. La verdad si, era pésima en la cocina la mayor parte de la comida que consumía la hacían las sirvientas o eran compradas, pocas veces me metía a la cocina y ayudaba. Además, ¿Cómo diablos iba a concentrarme con semejante chico a un lado mío? Para ser sincera Alex no era cualquier chico y hacia que me pusiera nerviosa en cada movimiento que hacia temiendo que fuera incorrecto y él se burlaba y de hecho así era pero no reía en forma de burla sino de disfrutar lo que yo estaba haciendo

-soy pésima en esto- comente mientras tiraba cascaras de huevos

-claro que no, solo hace falta un poco de practica

-o un mucho, es humillante que mi novio sepa cocinar mejor que yo- admití recargándome en la mesa

-jajá no es humillante, tiene ventajas

-jajá tienes razón- dije mientras el colocaba el pastel en el horno y lo ponía a cierta temperatura- ¿Dónde aprendiste todo esto?

-mi mama, le ayudaba cuando mi hermana no estaba o que ella recibía visitas

-bueno, tu mama hizo un buen trabajo. Tu mama es excelente maestra o tu un excelente estudiante

-o ambas- admitió con una sonrisa, después fue hacia donde yo estaba y me abrazo mirándome directo a los ojos, no sabía qué era lo que estaba haciendo

-¿algunas vez te han dicho que tienes la sonrisa más hermosa del mundo?- pregunto

-¿del mundo? ¿Eso no es exagerar?

-claro que no, del mundo es quedarse corto –dijo con una mirada tentadora

-creo que no, eres el primero- admití sin saber que mas decir, cuando él me miraba de esa forma no había manera de pensar en lo que tenía que decir y en qué manera decirlo las palabras salían por si solas

-¿tu…ex. Nunca te lo dijo?- pregunto

-¿Pato? Para nada, el jamás haría eso si no fuera delante de sus amigos

-eso no es ser novio- se quejo, después aparto un mechón de mi rostro que estaba cerca de mi ojo izquierdo –y tienes la mirada más linda de todo el planeta

-creo que en miradas hay alguien más que me gana- admiti, el rio al darse cuenta que esa persona de quien hablaba era el

-yo no cuento para nada Audrey- rio por debajo

-claro que si, cuentas para mí- dije sin pensar de nuevo, el miro mis ojos y después mis labios así un par de veces para después estrechar sus labios con los míos….